Cómo molas, cazador
con tu traje de camuflaje
matando moscas con un cañón
y creyéndote tan salvaje
cómo molas, cazador
matando bichos por deporte
fardando con tus amigotes
a ver quien la tiene más grande
cómo molas, cazador
creyéndote tan importante
porque mantienes el ecosistema
en un equilibrio constante
con tu escopeta al hombro
tus cananas colgantes
con tu jauría de perros
humillados y muertos de hambre
cómo molas, cazador
acudiendo a las monterías
donde por un puñado de euros
te sirven la pieza fría
y te vas a casa tan contento
con tu trofeo bajo el brazo
proclamando a los cuatro vientos
que no eres mas que un pelmazo.